Las encuestas indican que Brasil genera anualmente alrededor de 57 millones de toneladas de residuos sólidos urbanos, de los cuales alrededor del 30% (17 millones) son envases posconsumo, lo que tiene un gran impacto en el medio ambiente. Esta es una realidad que se observa en todo el mundo y que justifica una creciente preocupación de la sociedad con el tema de la sustentabilidad.El concepto de sustentabilidad nos trae nuevos desafíos, no solo ambientales, sino principalmente políticos y económicos, estando asociado a la necesidad de cambio en el comportamiento social y, en consecuencia, empresarial.En este contexto se encuentran los cambios en los requerimientos de consumo y la formación de cadenas de suministro sostenibles.Este artículo tiene como objetivo explicar el alcance y los impactos de los cambios necesarios en la cadena de suministro, con un enfoque Logística de embalaje post-consumo.
Historia del concepto de desarrollo sostenible |
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La figura 1 muestra una serie de eventos y movimientos ambientales que surgieron a partir de la década de 1960, en el período posindustrial, provocados por la percepción de degradación ambiental provocada por el crecimiento de la producción industrial de materias primas, y la inadecuada disposición de residuos industriales, contaminando el suelo y el agua para satisfacer la creciente demanda de productos por parte de las Naciones Unidas - ONU. En 1983, el informe Nuestro Futuro Común, originado por la Comisión Brundland, dio notoriedad al término “sustentabilidad”, incluyéndolo en las discusiones políticas: “Desarrollo Sustentable es la capacidad de las generaciones actuales para satisfacer sus necesidades sin comprometer la satisfacción de las necesidades de las generaciones futuras.” Este concepto fue trabajado en diversas discusiones científicas y políticas, siendo introducido en 1987 sobre una base de triple resultado, lo que indica que la sustentabilidad es una condición que inexorablemente considera las dimensiones económica, social y ambiental al mismo tiempo. tiempo tiempo: “La protección del medio ambiente y el desarrollo social y económico son fundamentales para el desarrollo sostenible”.
Paralelamente a las discusiones internacionales sobre Desarrollo Sostenible, cada país buscó desarrollar soluciones internas a los problemas ambientales con impacto local, como la contaminación del agua, el suelo y el aire. En Europa, Alemania es un país destacado en el desarrollo de legislación e implementación de soluciones asociadas al medio ambiente. En 1974, se estableció en ese país la Agencia Federal del Medio Ambiente con el objetivo de financiar y apoyar la investigación en el área, con el fin de apoyar el desarrollo de conceptos para la formación de un ministerio federal. En 1986, después del accidente nuclear de Chernobyl, se formó el Ministerio Federal de Medio Ambiente, Conservación del Medio Ambiente y Seguridad Nuclear. Desde entonces, se ha establecido legislación específica para cada tema ambiental, como Agua, Conservación de la Naturaleza, Energía Atómica y Control Federal de Contaminación, entre otras. En cuanto a la política de residuos sólidos, en Alemania, en 1986, se estableció la Ley de Reducción y Eliminación de Residuos, a partir de la cual se editaron varias normas, como la reducción de Envases y Embalajes, en 1991; Aceites Usados, en 1987; y Solventes, en 1989 (NEYMAN, 1996). En 1994 se promulgó la Ley de Economía de Ciclo Completo y Gestión de Residuos, en sustitución de la ley de 1986, ampliando la responsabilidad del fabricante por todo el ciclo de vida de su producto. En este contexto, ya se está creando una jerarquía de actuaciones sobre los residuos, entre las que el primer paso es evitar su generación, seguida de la necesidad de valorizarlos, en forma de reciclaje, reutilización o generación de energía, o, en última instancia, proporcionando eliminación ambientalmente adecuada de los residuos no valorizables. Incluso con esta larga historia de iniciativas de sostenibilidad en Alemania, los objetivos de recogida se fueron introduciendo de forma paulatina, de acuerdo con la definición de objetivos europeos, debiendo alcanzar una recogida selectiva del 50% de los residuos a finales de 2001 y del 60% hasta 2008. Ver tablas con objetivos europeos para la primera y segunda etapa. |
(EUROPA, 2009) |
EL CASO BRASILEÑO En Brasil, en 1981, se concibió la Ley 6.938, denominada Política Nacional Ambiental. A partir de esta ley se iniciaron varias discusiones que culminaron con la formulación de la Ley de Aguas en 1997, además de la revisión, por parte del Consejo Nacional del Medio Ambiente –Conama–, de los criterios utilizados para el licenciamiento ambiental. En 2000, se reglamentó la ley de recolección y disposición de residuos de envases de plaguicidas y, en 2010, se estableció la Política Nacional de Residuos Sólidos (PNRS), que aún está en proceso de regulación y ya incluye los conceptos de jerarquía de acciones para la gestión de residuos y la responsabilidad compartida Las metas brasileñas para el volumen de residuos que deben ser recolectados y reciclados aún están en proceso de definición. El reglamento del PNRS indicó un plazo para que cada sector o empresa presente una propuesta de metas, que serán evaluadas por un comité técnico del gobierno y luego validadas. Se estima que para fines de 2011 ya estarán establecidas las metas y planes de acción de cada sector involucrado con la generación y comercialización de envases Los problemas asociados a la disposición de residuos sólidos están asociados a la necesidad de organizar planes y objetivos en diferentes ámbitos, con el fin de incidir en el reajuste de las cadenas de suministro hacia cadenas ambientalmente apropiadas y, en última instancia, sostenibles. |
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Una cadena de suministro sostenible es aquella que cumple con las tres dimensiones de la sostenibilidad:• Ambiental: buscan reducir los impactos ambientales generados por el ciclo de vida de cada producto. Estos impactos se asignan en las diferentes etapas de la cadena de suministro y se pueden medir a través de varios indicadores, tales como: consumo de energía, agua, emisiones de CO2, generación de residuos, porcentaje de residuos devueltos y residuos con disposición adecuada.• Social: actuar de tal manera que mantenga y promueva una relación social saludable entre todos los involucrados en las actividades de la cadena de suministro, minimizando los daños a las personas y las comunidades. La calidad de las relaciones de una cadena se puede evaluar a través de indicadores como el número de accidentes, horas de capacitación e ingresos totales generados, así como actitudes empresariales que brinden inclusión social, reducción de la siniestralidad laboral y explotación sexual infantil, entre otros. .• Económica: esta es la dimensión tradicional de la evaluación empresarial a través de la cual se busca maximizar las ventas y la rentabilidad. En una cadena de suministro sustentable, los factores económicos no están atados a cada empresa individualmente, siendo el resultado conjunto. El esfuerzo por garantizar la calidad económica y financiera de toda la cadena de suministro es una gran tarea, uno de los principales retos para construir una cadena de suministro sostenible es el conocimiento que cada eslabón debe tener de la cadena en su conjunto, para asegurar, a través de relaciones y repartición de responsabilidades, que se está haciendo lo mejor en las tres diferentes dimensiones a lo largo de todo el proceso, desde la extracción de materias primas hasta la disposición de residuos de las empresas para permanecer y crecer en mercados futuros, donde los consumidores y la sociedad demandarán una postura sostenible, ya sea cambiando sus hábitos de consumo o a través de la legislación. |
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La Figura 2 ilustra la transformación necesaria en las cadenas de suministro para hacerlas ambientalmente adecuadas, de acuerdo con la jerarquía de acciones propuestas en la legislación de la Unión Europea (UE) y ahora en la Política Nacional de Residuos Sólidos (ver Tabla 2). , Clasificación y Transformación de Residuos) y, potencialmente, nuevos actores y relaciones. Esta situación crea un nuevo flujo de valores y, en consecuencia, nuevos negocios.Parte de lo que hasta entonces se entendía como gestión de residuos sólidos, y tenía gestión gubernamental, comienza a configurar un nuevo sector económico, encargado de transformar los residuos en materias primas. materias primas y/o productos nuevos, los productos químicos presentes en el producto sean los más seguros, que los productos puedan ser desmantelados al final de su vida útil para su reciclaje y que los materiales contengan elementos reciclados y reciclables en su composición. es posible mantener una cadena de suministro ecoeficiente, reduciendo la extracción de materias primas vírgenes y reduciendo la disposición inadecuada de materiales, es decir, tratando materiales que pueden ser aprovechados como residuos.
SOLUCIONES DE LOGÍSTICA INVERSA EN TODO EL MUNDO Se estima que en 2007 se recogieron en todo el mundo entre 2,5 y 1,2 billones de toneladas de residuos, de los cuales 125 billones fueron residuos sólidos urbanos (RSU). La disposición de estas RSU movilizó aproximadamente US$ 600 mil millones a través de la retribución de las actividades de recolección, relleno sanitario, incineración, compostaje, reciclaje y otros tratamientos complementarios, además de los montos relacionados con la comercialización de los 3 millones de toneladas de material reciclado generado ( ver Figura XNUMX). |
(Abrelpe, 2007) |
La forma en que cada país distribuye responsabilidades dentro de este proceso de transformación incide directamente en el flujo de valores de la cadena y en la postura de cada eslabón frente a las inversiones y decisiones a tomar. Las diferentes formas de distribución de responsabilidades se ilustran en la figura 3. El flujo 1 es similar al proceso europeo actual, en el que existe una entidad sin ánimo de lucro responsable de gestionar el proceso de recogida y clasificación de residuos. Esta entidad tiene su costo financiado por asociaciones empresariales, además de gestionar el proceso de recolección y clasificación, y también vende estos residuos a las industrias manufactureras. El concepto del proceso es que esta operación se autofinancia, es decir, los ingresos generados por la venta de los residuos deben remunerar los costos de la operación, la cual se encarga de planificar y operar la logística inversa de los residuos de envases y su comercialización. El resultado económico de Ponto Verde en 2008 fue positivo. Al tratarse de una entidad sin ánimo de lucro, los resultados del ejercicio se reinvierten o utilizan en la propia actividad de logística inversa de residuos o en actividades relacionadas (Ponto Verde, 2008). Sin embargo, este resultado expresa el desarrollo del mercado de residuos y las posibilidades de obtener ganancias económicas y financieras para la cadena de suministro.El Flujo 2 representa una alternativa en la que el gobierno actúa en la recolección de residuos. A priori, el gobierno no estaría involucrado en su comercialización, siendo esta responsabilidad de la empresa de recolección o clasificación. En algunos lugares de Brasil tenemos una situación similar, en la que el municipio (por ejemplo, São Paulo) asume parte de los costos de recolección, dejando el costo de clasificación y comercialización de los residuos a las cooperativas. |
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Otra situación común en Brasil se ilustra en el Flujo 3, en el que la recolección y clasificación son realizadas por cooperativas sin apoyo financiero de un sector específico o entidad gubernamental. En este caso, las cooperativas soportan sus gastos de funcionamiento a través de los ingresos obtenidos por la venta de residuos a recicladores.REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS Abracelpe, Sección Especial – Panorama de los Residuos Sólidos, 2007. Estadísticas europeas de envases y residuos de envases, 1998 – 2006, 2009. NEYMAN, Monika T. El Sistema de Derecho Ambiental de la República Federal de Alemania, Estudio Anual de Derecho Internacional y Comparado, 1996 Gisela Mangabeira Souza es consultora senior de ILOS – Instituto de Logística y Cadena de Suministro gisela.sousa@ilos.com.br Teléfono: (11) 3847-1909 Leonardo Pozes Gerente de Planificación Estratégica Grupo AndinaVer la segunda y última parte de este artículo en la edición de agosto (nº 189) de Tecnologística o en www.ilos.com.br |