Diferentes visiones de la planificación de la demanda

La planificación de la cadena de suministro es una herramienta crucial que orienta las decisiones de una empresa, siendo fundamental para asegurar el logro de sus objetivos logísticos y de producción con un uso eficiente de los recursos.

Para cumplir estos objetivos y planificar sus acciones, las empresas no escatiman esfuerzos en estimar las demandas del mercado en horizontes temporales prolongados y con un alto grado de detalle sobre productos y dimensiones geográficas. Sin embargo, inmersos en este mar de información, a menudo resulta difícil saber cómo utilizar los datos para aplicaciones en diferentes tipos de planificación. Es común perderse en el uso de visiones más amplias, fáciles de asimilar, pero con menos aplicación práctica, y análisis extremadamente detallados, de mayor utilidad, pero con un alto grado de error y un elevado esfuerzo.

Para no caer en estas trampas, es necesario primero entender qué decisiones debe tomar cada área receptora de la planificación, y qué información realmente necesita para prepararse adecuadamente a corto, mediano y largo plazo.

En el corto plazo (los siguientes tres meses, por ejemplo), cuando las acciones ocurren en un horizonte temporal inmediato, las decisiones son de naturaleza muy operativa. La gestión necesita información específica, como previsiones detalladas de demanda por SKU, CD o incluso cliente, ya que casi llega el momento de secuenciar la producción, reunir stocks de materias primas, PA y embalajes y definir rutas comerciales. Por lo tanto, es necesario un esfuerzo para llevar información útil y detallada a estas áreas.

Cuando se mira a un horizonte más lejano, la historia es diferente. Señalar qué ocurrirá en un periodo más alejado del actual es mucho más complicado, sobre todo a niveles más detallados. Esta alta incertidumbre significa que las empresas pueden dejar de lado una planificación más larga y centrarse en lo que es más seguro y predecible. Sin embargo, una visión más consolidada también puede servir a otros planes. Un análisis por familia de productos o áreas geográficas más amplias (como regiones o países) puede resultar muy útil para planificar acciones de marketing, negociar con proveedores, sustituir equipos y definir objetivos comerciales.

Figura 1. Diferentes puntos de vista de la planificación de la demanda sirven para diferentes propósitos. Fuente: ILOS

En relación al largo plazo, a un año o más, la información sobre los volúmenes totales estimados mediante una simple previsión estadística ya sirve como punto de partida para discusiones más estratégicas como las grandes capacidades de almacenamiento y transporte (que dependen poco del tipo de producto). o cliente). ), fusiones y adquisiciones, adopción de tecnología y planificación financiera.

Entonces, al equilibrar la necesidad de detalles precisos a corto plazo con una visión más amplia a largo plazo, las empresas pueden aprovechar al máximo el poder de la planificación de la cadena de suministro, garantizando un viaje exitoso. 

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