Mientras que en Brasil, las empresas de comercio electrónico, incluso las grandes, todavía luchan con los tiempos de entrega, en los Estados Unidos, Amazon se prepara para atacar el mercado mundial de comercio electrónico. Famosa por su eficiencia en la entrega y plazos reducidos, Amazon estudia crear un servicio de entrega que compita con empresas como FedEx, DHL y UPS, entre otras. La red de entrega global de Amazon también enfrentaría a dos gigantes internacionales del comercio electrónico: Amazon y AliBaba.
Según documentos a los que tuvo acceso Bloomberg, la idea de Amazon es ser la única interfaz entre el productor y el consumidor, estén donde estén. En el concepto de "envío con un clic", el productor contactaría a Amazon a través del sitio web o la aplicación móvil y organizaría el envío del producto. Por su parte, Amazon recogería la carga en la industria, la llevaría al puerto, la subiría al barco, la recogería en el país de destino y luego la entregaría en la residencia del comprador. ¡Todo en un solo clic!
Además de facilitar la contratación, la red global de Amazon también eliminaría intermediarios en el comercio internacional, especialmente los relacionados con temas legales y burocráticos, agilizando el comercio entre países. Al consolidar los miles de envíos que tendría, Amazon también reduciría los costes de este tipo de envíos, aumentando su competitividad frente a la competencia.
Por ahora todo queda en el mundo de las especulaciones, pero las evidencias que comienzan a surgir, sumadas a las exitosas incursiones previas del minorista norteamericano en otros segmentos, amplían las posibilidades de que esta historia sea realmente cierta. Según datos de Accenture y AliResearch, se espera que el comercio electrónico internacional mueva, en 2020, algo alrededor de US$1 billón, sirviendo a 900 millones de personas en todo el mundo. No está mal, ¿eh?
Referencias: