Rio de Janeiro - La presidenta Dilma Rousseff anunció este jueves que su gobierno impulsará este año una nueva serie de concesiones viales, ferroviarias, portuarias y aeroportuarias al sector privado, que podrán incluir terminales aéreas en ciudades como Porto Alegre, Salvador y Florianópolis.
“Vamos a lanzar un nuevo proceso de concesión para ofrecer un nuevo mapa logístico para Brasil y racionalizar los costos de transporte en el país”, dijo el presidente en el acto de inauguración de las obras de ampliación y modernización de un puerto privado en Río de Janeiro.
Dilma dijo que, luego de un primer proceso en el que fueron adjudicados los aeropuertos de Río de Janeiro, São Paulo, Brasilia, Campinas, Belo Horizonte y Natal, el gobierno estudia licitar otras terminales aéreas con vuelos internacionales.
“Vamos a hacer nuevas concesiones aeroportuarias. Estamos estudiando algunas alternativas. Estudiamos (la concesión de) Porto Alegre, Salvador y Florianópolis, pero puede haber otros. Hay varias hipótesis”, señaló.
Según ella, uno de los principales objetivos de Brasil es aumentar el transporte por vías navegables, especialmente de granos cultivados en la región occidental del país y exportados a través de puertos en el Océano Atlántico.
“Vamos a dar prioridad (en las concesiones) al transporte por vía fluvial porque Brasil necesita mucho de esa logística y eso generará una importante reducción de costos para los exportadores de granos”, señaló.
Según el presidente, el cambio en el marco regulatorio de los puertos ya ha permitido un salto importante en la participación del sector privado en las terminales marítimas del país.
“Ya fueron autorizados 38 proyectos privados para el sector privado, incluyendo 22 nuevas terminales marítimas, con una inversión prevista de R$ 11 mil millones”, detalló.
Las obras inauguradas hoy en Río de Janeiro fueron el resultado de una inversión de R$ 1,5 mil millones, en su mayoría privada, en un acuerdo con las empresas que operan en el puerto, que se comprometieron a proporcionar los recursos a cambio de la extensión del plazo. del contrato de arrendamiento.
Según Dilma, otras 27 empresas operadoras de puertos anunciaron inversiones de R$ 11,2 mil millones a cambio de la ampliación de sus concesiones.
Estos proyectos dependen de la autorización del Tribunal Federal de Cuentas.
Esta inversión convirtió a la terminal marítima de Río en el muelle continuo para operaciones de contenedores más grande de toda Sudamérica y aumentó su capacidad en un 63%, lo que ahora le permite manejar hasta 300 vehículos por año.
“Fue una inversión que permite que Río de Janeiro tenga uno de los puertos más modernos del país y que contribuye a sentar bases más sólidas para el crecimiento de Brasil”, dijo.
El presidente dijo que, para enfrentar las “dificultades coyunturales” que afectan a la economía brasileña, el gobierno no solo está impulsando un ajuste fiscal, sino que también pretende atraer inversiones del sector privado en infraestructura y logística.
“Quiero que Brasil recupere su ritmo de crecimiento. Esta es mi obsesión”, precisó.
Fuente: Exame