La incidencia de eventos naturales, como tifones, huracanes, tsunamis e inundaciones, ha ido creciendo en los últimos años en paralelo con los cambios en las condiciones climáticas de nuestro planeta. Cuando ocurren en regiones habitadas, estos eventos terminan provocando desastres naturales, que se agudizan en regiones cuya población crece de manera desordenada, con enormes daños a la infraestructura local y sufrimiento y dolor a la población [6]. En las últimas tres décadas, la ocurrencia de desastres aumentó de 50 a 400 por año [2] y, para los próximos 50 años, se espera que esta tasa sea cinco veces mayor [4].
El desastre natural más reciente fue el Huracán Dorian, que llegó a Bahamas el pasado domingo (01/09/19) en categoría 5, con vientos de hasta 320 km/h. Las autoridades advirtieron a los residentes que se prepararan para fuertes vientos y fuertes lluvias. El Centro Nacional de Huracanes advirtió que Dorian podría causar mucho daño, pero los pronósticos siempre son inciertos.
Prepararse para un huracán no es tarea fácil. Incluso porque la logística de los desastres naturales es compleja por la dificultad de predecir la intensidad y duración del evento.
La Logística Humanitaria es un brazo de la logística que tiene la función de planificar, implementar algunos procedimientos necesarios para ayudar a la población, administrar los recursos y tener el conocimiento de la operación en el manejo de emergencias. La Figura 1 muestra la comparación entre la Logística Empresarial y la Logística Humanitaria.
Figura 1 – Diferencias entre Logística Humanitaria y Empresarial
Fuente: [6]
La logística es un aspecto crítico para el éxito de una operación humanitaria [3]. La cadena de suministro debe ser flexible hasta el punto de tener la capacidad de responder rápidamente a eventos impredecibles y de manera eficiente a las limitaciones presupuestarias [5]. Sin embargo, como toda cadena de suministro, la humanitaria también tiene sus desafíos y dificultades. Entre ellos, cuellos de botella administrativos y logísticos debido a la débil infraestructura para recibir donaciones y gestionar la acción de múltiples agentes involucrados en las operaciones (gobierno, agencias de ayuda, donantes, militares, ONG e instituciones privadas).
Figura 2 - Cadena de Suministro Humanitario
Fuente - [1]
¿Y cómo gestionar los recursos? El Proyecto Esfera establece un conjunto de normas comunes y universales aplicables a todos los sectores humanitarios básicos y propone que cada víctima necesite entre 7,5 y 15 litros de agua al día para beber, cocinar y bañarse, además de ingerir 2,1 mil calorías/día y 3,5 metro3 del refugio
De acuerdo con Guía de Saneamiento en Desastres Naturales de la Organización Mundial de la Salud, es necesario contar con una estructura para la movilidad de personas y recursos. Los automóviles, aviones y barcos son útiles y permiten un uso más eficiente del personal técnico. Los mejores vehículos de apoyo son los modelos Jeep y Land Rover, ya que son más adecuados y pueden moverse más rápido. En general se necesitan 5 vehículos tipo Jeep/Land Rover, dos vehículos que tengan capacidad para transportar 750 kg, y un camión con capacidad de 3 a 4 toneladas, serían suficientes para abastecer las operaciones sanitarias de 100.000 personas.
Otro detalle importante es la ubicación de los puestos logísticos. Estos puestos tienen la función de orientar a la población, proporcionar medicamentos y material de rescate, además de contar con profesionales calificados y capacitados.
El almacenamiento de insumos también es un tema delicado, debido a las precarias condiciones de la infraestructura en las zonas afectadas. La ubicación de los almacenes en casos de desastres naturales es un tema importante desarrollado en la investigación, como se discute en Distribución de Centros de Apoyo a la Logística Humanitaria – Preparación para la respuesta ante desastres naturales. Este artículo tiene como objetivo desarrollar un modelo de distribución espacial para reducir el tiempo de respuesta de atención a las poblaciones afectadas por el desastre. La aplicación de modelos de apoyo a la decisión operativa es necesaria en muchos casos, debido a la escasez de tiempo y recursos limitados.
El desarrollo de nuevas tecnologías ayudó a la logística y el tiempo de reacción en desastres, como el terremoto de Haití en 2010. La ONG británica Map Action utilizó GPS, imágenes satelitales y Google Maps para obtener la ubicación de las personas sin hogar por el desastre. Se pudo verificar el estado de calles y caminos, en caso de que estuvieran bloqueados o colapsados, facilitando la búsqueda de víctimas y minimizando el tiempo perdido.
Y hablando de Google Maps, es posible seguir la trayectoria del huracán Dorian en tiempo real y conocer la ubicación de los refugios en la costa este de los Estados Unidos, como se muestra en las Figuras 3 y 4.
Figura 3 – Trayectoria del huracán Dorian (02/09/19 a las 18:30)
Fuente – Google Maps
Figura 4 – Ubicación de los refugios para el huracán Dorian
Fuente – Google Maps
Otra forma de optimizar la logística es a través de la aplicación de conceptos empresariales en desastres, como la Cruz Roja, que firmó contratos con grandes cadenas comerciales y empresas de transporte con el fin de obtener precios preestablecidos para suministros y servicios de emergencia, evitando pérdidas de tiempo. negociaciones.
La logística en desastres naturales se caracteriza por un conjunto de arduas actividades de gestión, combinadas con la incertidumbre del impacto y la dificultad de medir los daños causados. Y todas estas actividades deben gestionarse siguiendo la rendición de cuentas y la transparencia en el uso de los recursos donados de manera que se garantice que el objetivo se alcance realmente.
Fontes:
[1] Balcik, B., Beamon, BM, Krejci, CC, Muramatsu, KM y Ramírez, M. (2010). Coordinación en cadenas de ayuda humanitaria: prácticas, desafíos y oportunidades. Revista Internacional de Economía de la Producción, 126(1), 22-34. http://dx.doi.org/10.1016/j.ijpe.2009.09.008.
[2] Kovács, G. y Spens, K. (2007). Logística humanitaria en operaciones de socorro en casos de desastre. Revista internacional de distribución física y gestión logística, 37(2), 99-114. http://dx.doi.org/10.1108/09600030710734820.
[3] Trunick, P. (2005). Informe especial: entrega de socorro a las víctimas del tsunami. Logística Hoy, 46(2), 1-3.
[4] Thomas, A. y Kopczak, LR (2007). Cadenas de suministro que salvan vidas: desafíos y el camino a seguir. En HL Lee & C.-Y. Lee (Eds.), Construyendo la excelencia de la cadena de suministro en las economías emergentes (págs. 93-111). Nueva York: Springer.
[5] Van Wassenhove, L. (2006). Logística de la ayuda humanitaria: gestión de la cadena de suministro a toda velocidad. The Journal of the Operational Research Society, 57(5), 475-498. http://dx.doi.org/10.1057/palgrave.jors.2602125.
[6] DA COSTA, Sérgio Ricardo Argollo et al. Cadena de suministro humanitario: un análisis de los procesos de acción en desastres naturales. producción, v. 25, núm. 4, pág. 876-893, 2015.
https://www.marinha.mil.br/spolm/sites/www.marinha.mil.br.spolm/files/102236.pdf
http://acaohumanitaria.org.br/temas/projeto-esfera/
https://www1.folha.uol.com.br/fsp/mercado/me1601201102.htm
http://www.scielo.br/pdf/prod/v25n4/0103-6513-prod-0103-6513147513.pdf
https://oglobo.globo.com/mundo/furacao-dorian-destroi-bahamas-caminho-da-costa-da-florida-23920971