Un dictamen técnico del Ibama arrojó incertidumbres en la recta final del proceso de licenciamiento de Porto Sul da Bahia, megacomplejo portuario ubicado en Ilhéus, que prevé inversiones de R$ 3 mil millones en dos grandes terminales. El dictamen, suscrito por nueve analistas de la dependencia federal, concluye que hasta el momento solo se ha cumplido efectivamente la mitad de las condiciones socioambientales establecidas en la licencia preliminar y pone en duda la habilitación para el inicio de las obras.
La primera licencia, que acredita la viabilidad ambiental del emprendimiento, fue otorgada a fines de 2012. En ella se definieron 14 requisitos que se deben cumplir para obtener la licencia de instalación (LI). Es este segundo documento el que permite la construcción del puerto en serio. El gobierno de Bahía, responsable por el proyecto, dice que ya cumplió con todos los requisitos. El mes pasado, por lo tanto, presentó una solicitud formal de LI ante el Ibama. Para los analistas de la autarquía, sin embargo, este trabajo estaba literalmente a la mitad.
El dictamen, de fecha 18 de agosto, considera que se cumplieron siete condiciones y no se cumplieron tres. Otras cuatro restricciones habrían avanzado solo "parcialmente". “Con el fin de posibilitar un pronunciamiento concluyente para la emisión de la LI”, según el informe de 130 páginas, “se recomienda que las pendencias señaladas a lo largo del dictamen sean atendidas por el empresario y remitidas al Ibama para su evaluación”. Como afirman los propios analistas, esta no es una posición definitiva y mucho menos irreversible, pero demuestra que la polémica en torno al Porto Sul da Bahia aún está lejos de terminar.
El desarrollo está ubicado en una región preservada de la Mata Atlántica y con fuerte atractivo turístico. Cuenta con el apoyo de una parte importante de la población local, pero se enfrenta a la oposición de los grupos ecologistas. La ubicación del complejo portuario, originalmente planeado para Ponta da Tulha (al sur de Ilhéus), tuvo que cambiar debido al impacto potencial sobre las comunidades indígenas. Ante la presión, se dirigió a Aritaguá, estero al norte de la ciudad.
Porto Sul podrá mover hasta 100 millones de toneladas en el 25º año de operación. Ya tenía autorización de la Secretaría de Puertos. Se planean dos terminales vecinas. Uno es de Bahia Mineração, que extrae mineral de hierro en el municipio de Caetité y pretende transportar su producción a través de la Ferroviaria de Integración Oeste-Este (Fiol), cuyo trayecto termina en Ilhéus. El ferrocarril está retrasado.
La otra terminal será explorada, en régimen de condominio, por empresas seleccionadas por el gobierno de Bahia. Puede implicar mover minerales, granos e incluso contenedores. La próxima semana se publicará un aviso de convocatoria para las partes interesadas.
En el dictamen, técnicos del Ibama señalan dudas sobre la disposición de efluentes y el supuesto retraso en el plan de adecuación de la infraestructura alrededor del puerto. También alegan que no han recibido el derecho de uso de los recursos hídricos para el proyecto. Aparentemente, se trata de cuestiones que no amenazan el desarrollo en sí, pero que podrían poner en peligro los planes para realizar las obras este año.
Eracy Lafuente, coordinadora de seguimiento de políticas de infraestructura del gobierno de Bahía, resta importancia a los problemas de licenciamiento y dijo que ayer envió respuestas al Ibama. Según él, hay documentos no mencionados por el dictamen que ya están incluidos en los estudios enviados, como el plan de infraestructura en los alrededores y la construcción de un nuevo hospital. “No estamos pidiendo ningún compromiso o esfuerzo menor. El papel del analista ambiental es exigirle mucho al emprendedor, pero ya presentamos lo solicitado”.
Se diseñaron 38 programas ambientales básicos para cumplir con las condiciones y obtener el LI. “Puedes exigir uno u otro complemento de los programas. Pero, en términos generales, se cumplieron las condiciones de la licencia previa. Hemos sido absolutamente transparentes en la demostración de nuestros planes”, dice el coordinador.
Fuente: Valor Econômico
Por: Daniel Ritner