Los costos relacionados con las actividades de transporte son muy relevantes, ya que representan el 54% de los costos logísticos, según estudios realizados por ILOS en 2016. Por lo tanto, elegir la estrategia de transporte más acorde con las características operativas de sus actividades es una tarea fundamental. para cualquier negocio, con el fin de obtener los costos más bajos, cumpliendo con el nivel de servicio deseado.
El primer paso fundamental para definir o revisar una estrategia de transporte es entender los flujos de la empresa, ya sea entrante (de los proveedores a la empresa), transferencia (entre los eslabones de la propia empresa, ya sean fábricas, CD, almacenes, entre otros) y saliente (de la empresa a sus clientes). Es necesario entender cuáles son los volúmenes a transportar, cuáles son las rutas, cómo es la dispersión de clientes y proveedores, entre otros. En esta etapa se realiza la determinación de los costos de transporte para cada caso y la definición de los niveles de servicio a ofrecer a cada cliente.
Además de mirar dentro de la empresa, es fundamental mirar hacia afuera, analizar el mercado para conocer las prácticas de otras empresas y entender cuáles de estas son más comunes entre los competidores. En este punto específico, la OIT tiene la panel de carga que compara los precios del transporte por carretera e identifica las posibilidades de reducción de costes. Las fuentes secundarias también pueden ser fuentes importantes de información para este paso.
Figura 1: el panel de carga de ILOS es una buena fuente de información para comparar tarifas de carretera.
A continuación, se debe realizar un análisis más detallado de las rutas que realiza la empresa, cuáles son los volúmenes, regiones y regularidad de flujos para el posible establecimiento de circuitos o agrupaciones, de manera que las estrategias de contratación sean las más adecuadas para cada agrupación. llevado a cabo.
En base a estos datos, se puede tomar la decisión sobre qué estrategia de transporte se puede tomar, con el fin de responder preguntas como: ¿cuál modal es el más adecuado? En el caso del transporte por carretera, ¿se utilizará flota propia o de terceros? Si te decides por tu propia flota, debes dimensionarla y analizar las inversiones necesarias y no el nivel de servicio que desea ofrecer. Si se decide por una flota de terceros, se debe decidir entre una flota dedicada o no, si se contratarán contratistas independientes o transportistas, cuántos transportistas se contratarán, entre otras cuestiones.
Finalmente, es necesario establecer sus mecanismos de control, es decir, los indicadores que medirán el desempeño de la estrategia seleccionada en términos de la operación, los costos involucrados y la calidad y nivel del servicio brindado.
Ya sea definiendo una estrategia de transporte para una nueva operación o revisando una operación ya establecida, es fundamental que las empresas estén siempre conscientes de estos puntos para poder ofrecer un servicio de calidad sin lastrar su competitividad en términos de costos.